Tiroides que adelgaza, ¿Mentira o Verdad?
Bajar de peso no es sencillo. Ya probaste con el té, los aerobios, el chocolate y hasta dejaste de comer tu postre favorito. Entonces te encuentras con tu amiga de la infancia y para tu sorpresa está en la línea. Curiosa, le pides que te pase la dieta mágica. Entonces ella te responde:La tiroides que adelgaza.
¿Tiroides que adelgaza?. La glándula tiroides ha sido asociada con el peso durante mucho tiempo. Sus alteraciones son responsables de toda una revolución de síntomas. ¿Adelgaza o engorda? A continuación sabrás qué opina la ciencia y cuáles son los mitos que la rodean.
Tabla de contenidos
¿Qué relación existe entre el tiroides y el peso?
Las hormonas controlan tu cuerpo y, a veces, hasta tus emociones. Si quieres adelgazar debes tener en cuenta que algunas pueden ayudarte o por el contrario hacértelo más difícil.
El metabolismo es el conjunto de reacciones químicas que mantienen en funcionamiento el organismo. Su trabajo consiste en convertir los alimentos en energía. Para ello los descompone en proteínas, carbohidratos, lípidos y ácidos nucléicos.
Seguro has escuchado que el metabolismo se acelera o enlentece y que esto influye en tu peso. Lo que es cierto y se refiere a la velocidad en la que el cuerpo quema las calorías.
Tus kilitos de más no solo dependen de la cantidad de calorías que ingieras. Ello también responde a la rapidez con la que tu cuerpo las consume. Es aquí donde viene a jugar un papel esencial el tiroides.
Es una glándula endocrina con forma de mariposa. Se ubica en la base del cuello, por debajo de lo que se conoce como nuez o manzana de Adán. Su función es producir, almacenar y liberar hormonas tiroideas en la sangre.
¿Qué hormonas? La tiroxina (T4) y la triyodotironina (T3). Ambas controlan la temperatura corporal, el consumo de oxígeno, etc. Su función principal es regular el metabolismo. Un mal funcionamiento de la glándula puede hacer que se produzcan en exceso o haya un déficit de ellas.
La relación entre ambos términos es bastante compleja. Sin embargo, hay algo que queda bastante claro. El tiroides influye en el metabolismo y este a su vez en tu peso.
Cuando el tiroides adelgaza
Las enfermedades del tiroides provocan síntomas de todo tipo: nerviosismo, taquicardia, ausencia de la menstruación, etc. Todo depende de cuán afectada se encuentre la producción de sus hormonas.
Cuando el tiroides disminuye su actividad y produce menos hormonas T3 y T4 de lo normal se conoce como hipotiroidismo. Por el contrario, cuando aumenta su trabajo se nombra hipertiroidismo.
Los pacientes hipertiroideos tienen un metabolismo bastante acelerado. Mientras más hiperactivo sea el tiroides, mayor será la necesidad de calorías. Si no la suples con la alimentación, se produce una pérdida de peso.
En el pasado se usaron las hormonas tiroideas como una herramienta para adelgazar. Los expertos afirman que estas son más efectivas que muchas dietas convencionales. Sin embargo, estudios revelan que cuando disminuye el exceso de hormonas, por lo general el peso se recupera.
Eso no significa que tomar hormonas tiroideas sea la mejor opción para adelgazar. Es un método dañino para tu salud y puede tener consecuencias muy graves. Consulta a tu médico y no te auto mediques.
¿Sabías que existe una hormona que estimula la producción de T3 y T4? Se llama tirotropina o TSH y es segregada por la hipófisis. Ella estimula la producción de T3 y T4. Por tanto, un exceso o déficit de ella también puede afectar el tiroides.
Kilos de más, ¿culpa del tiroides?
El pantalón que te pusiste las Navidades pasadas ya no te cierra. Preocupada, corres al médico y le dices que tu tiroides no está bien, te está haciendo engordar. Para tu sorpresa el doctor no parece muy interesado y lo primero que te pregunta es: ¿qué comes?, ¿haces ejercicios?
Los estudios de la American Thyroid Association afirman que el hipotiroidismo solo es responsable de entre 2,2 y 4,5 kg de más. Por lo que no puedes culpar al tiroides de tus conflictos con la báscula. Ello es así a no ser que tengas graves trastornos tiroideos,
Otras investigaciones han estudiado a pacientes con hipotiroidismo que tienen tratamiento con levotiroxina. Los resultados demostraron que la pérdida de peso fue mínima, aun cuando la enfermedad estaba controlada.
¿Que tu metabolismo es más lento? Sí, es verdad, pero existen otros factores que contribuyen a que aumentes de peso. La alimentación, tu rutina diaria y hasta otras hormonas como la insulina.
Activa tu tiroides para adelgazar
Si padeces de hipotiroidismo y tienes dificultad para bajar de peso, existen formas naturales de estimular su actividad. Si estás sano y quieres adelgazar, estos consejos también te ayudarán.
¡Cuidado! No tomes suplementos ni medicamentos como la levotiroxina si tu médico no te lo indica. Puedes dañar tu tiroides y desarrollar un hipertiroidismo provocado.
– Incorpora algas a tu dieta: para fortalecer tu tiroides necesitas consumir alimentos ricos en yodo. Las algas como la kelp o kombu son una importante fuente de este mineral. Ponlas a cocinar un aproximado de 20 minutos para añadirla a tus guisos y legumbres.
–Masajea tus pies: ¿suena descabellado? La medicina alternativa afirma que en los pies se encuentran los puntos de energía de todos los órganos del cuerpo. Masajea la planta, justo en la zona entre el pulgar y el índice.
– Come picante: el jengibre, la pimienta de Cayena y la cúrcuma tienen innumerables beneficios para el tiroides y todo el organismo. Súmalos a tus platos favoritos, siempre con precaución y sin exagerar, solo pequeñas cantidades.
– Pon tu cuerpo en movimiento: los ejercicios aeróbicos y de fuerza te ayudarán a mantenerte en forma. Haz rutinas cortas pero intensas tres veces a la semana o más para eliminar el exceso de grasa. Bailar, nadar y caminar también es efectivo para adelgazar. No tienes excusas.
– Duerme bien: la calidad del sueño puede interferir en la salud del tiroides. Duerme de 7 a 8 horas. Disminuye el consumo de estimulantes y dispositivos electrónicos y asegura una habitación cómoda con poca luz.
– Consume alimentos ricos en selenio: el atún, el pavo, las nueces de Brasil y la carne vacuna alimentada con pasto contienen este oligoelemento. Esto ayuda a equilibrar los niveles de T4 en tu organismo. Cocínalos de manera sana, sin muchos condimentos artificiales. ¡Todo natural!